Primer hijo, primer nieto, primer sobrino... nunca inventé un mundo para vos que no fuera un mundo donde un niño pueda soñar, soñarse, y siempre con una cuota de verdad, tal como es la poesía...
Para ponerte a mi pecho todo lugar se convertía en un templo y siempre que era posible... mis caricias, al momento de bañarte, al momento de vestirte y hacerte dormir con esta canción -dulce poesía para decir la verdad- te mecía...
,,, sólo que ahora, en lugar de la versión del flaco Spinetta, te regalo la versión de Ricardo Mollo y con él, igual que él y Vera, lloro:
'PLEGARIA PARA UN NIÑO DORMIDO
Tweet to @lucilaele